Tuxtla Gutiérrez, Chiapas: El ambientalista de The
Nature Conservancy en Chiapas, Manuel Morales Román, planteó establecer
estrategias multilaterales para la conservación de los grandes
ecosistemas de la entidad, como la selva Lacandona, Sierra Madre de
Chiapas y Los Chimalapas, colindante con Oaxaca.
Comentó que estos territorios son albergues de especies emblemáticas, carismáticas, como el quetzal, el pavón, el jaguar entre otras que tienen una gran riqueza, por lo que se deben establecer acciones muy puntuales para la conservación de las Áreas Naturales Protegidas (ANP).
Indicó que en las ANP se contabilizan poco más de un millón 300 mil hectáreas, pero al interior se localizan centros de población que no pueden emprender actividades económicas que causen degradación, sino más bien, que asuman la responsabilidad de ser los primeros conservacionistas.
"Tenemos que entender que la actividad agropecuaria tiene que ser cada vez más amigable con los recursos naturales, se debe cambiar la estrategia de producir sin degradar, ni contaminar", puntualizó.
Asimismo, subrayó que los ecosistemas generan servicios ambientales pero éstos tienen que ser de calidad, sustentables como el café bajo sombra.
Por último, apuntó que las comunidades asentadas en las áreas boscosas tienen que ser parte de la toma de decisiones con planeación, no deben dejar de producir, pero tampoco generar una depredación, "tenemos que generar conciencia y educación ambiental, los bosques no pueden reflejar irresponsabilidad, sino que prevalezcan para las nuevas generaciones".
Fuente: ISAÍ LÓPEZ|Heraldo de Chiapas
Comentó que estos territorios son albergues de especies emblemáticas, carismáticas, como el quetzal, el pavón, el jaguar entre otras que tienen una gran riqueza, por lo que se deben establecer acciones muy puntuales para la conservación de las Áreas Naturales Protegidas (ANP).
Indicó que en las ANP se contabilizan poco más de un millón 300 mil hectáreas, pero al interior se localizan centros de población que no pueden emprender actividades económicas que causen degradación, sino más bien, que asuman la responsabilidad de ser los primeros conservacionistas.
"Tenemos que entender que la actividad agropecuaria tiene que ser cada vez más amigable con los recursos naturales, se debe cambiar la estrategia de producir sin degradar, ni contaminar", puntualizó.
Asimismo, subrayó que los ecosistemas generan servicios ambientales pero éstos tienen que ser de calidad, sustentables como el café bajo sombra.
Por último, apuntó que las comunidades asentadas en las áreas boscosas tienen que ser parte de la toma de decisiones con planeación, no deben dejar de producir, pero tampoco generar una depredación, "tenemos que generar conciencia y educación ambiental, los bosques no pueden reflejar irresponsabilidad, sino que prevalezcan para las nuevas generaciones".
Fuente: ISAÍ LÓPEZ|Heraldo de Chiapas
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